A UN AÑO DE UN HALLAZGO REVOLUCIONARIO

Kangurito dijo el 6/11/05:
El día que San Juan cambió la historia de los dinosaurios El 5 de noviembre del año pasado un grupo de paleontólogos locales hizo tambalear la teoría de la evolución de esos animales prehistóricos. JORGE PUGA - DIARIO DE CUYO -------------------------------------------------------------------------------- Hace exactamente un año los investigadores del Museo de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de San Juan lanzaron una bomba en el seno de la comunidad científica internacional. Publicaron en el Congreso Mundial de Paleontología de Vertebrados el hallazgo de tres fósiles que hicieron tambalear la teoría más aceptada hasta ahora acerca de por qué hubo una explosión evolutiva de los dinosaurios en el Mesozoico. A un año de aquel hallazgo los científicos sanjuaninos no sólo afilaron más los detalles de su investigación, sino que lograron atraer a la provincia la mirada de los paleontólogos más encumbrados del mundo. Al revuelo lo armaron los huesos fosilizados de tres animales hallados cerca de Ischigualasto que son una suerte de eslabón perdido entre los animales del Triásico y el Jurásico. Es decir, se trata de animales típicamente Jurásicos mezclados con animales típicamente Triásicos. Una excentricidad nunca antes vista y que, según los sanjuaninos, demuestra que al menos en esta parte del mundo hubo una transición paulatina, tranquila, sin cambios bruscos, entre los animales de un período y otro. Esa es justamente la bomba que tiraron. Hasta ese momento estaba establecido prácticamente como un dogma que los animales del Triásico se habían extinguido casi en su totalidad debido a un gran cataclismo -posiblemente la caída de un meteorito gigante- que cambió las condiciones climáticas globales y eliminó un gran porcentaje de la vida sobre el planeta. Según esta teoría, los sobrevivientes del exterminio fueron los primeros dinosaurios, quienes al no tener competencia -hasta ese momento los reyes eran grandes reptiles parecidos a los cocodrilos- se adueñaron del mundo en el período Jurásico. Pero el hallazgo de los sanjuaninos -un equipo comandado por los paleontólogos Oscar Alcober y Ricardo Martínez- indica que aquí existió la estabilidad climática suficiente como para garantizar la evolución de los exóticos animales mezcla de los del Triásico y el Jurásico. "Lo que descubrimos genera preguntas para las cuales aún no hay respuestas claras; creo que a partir de esto, Ischigualasto va a tomar mucho más valor científico del que ya tenía", se entusiasma Alcober. Y no parece estar equivocado. Desde que se dio a conocer la noticia, muchos investigadores de todo el mundo se pusieron en contacto con el Museo sanjuanino para pedir más información. Incluso algunos científicos de primera línea, como Dennis Kent, coautor de la teoría de la extinción masiva a fines del Triásico, vino a San Juan a ver de cerca los detalles del descubrimiento que hizo tambalear sus propias investigaciones. Estuvo aquí alrededor de dos semanas y compartió la última campaña de extracción de fósiles encarada por el equipo sanjuanino. En esta se hallaron más fósiles de animales del Triásico con características jurásicas y el mismo Kent pudo palpar lo que no había visto en ningún otro lugar del mundo. Es más, se llevó muestras para analizar en la universidad de Columbia y prometió armar más revuelo con la teoría del Sur sin extinción masiva. "No es que nosotros seamos muy inteligentes y hayamos visto algo que ellos pasaron por alto; lo que sucede es que aquí hay registros fósiles y geológicos que son distintos a los que estudiaron en el hemisferio Norte y que les permitieron elaborar la teoría de la extinción masiva; acá los registros dicen otra cosa", explica Alcober. Según el sanjuanino, la mayoría de los estudios que permitieron elaborar la teoría de la extinción se hicieron en el hemisferio Norte. Y en todo caso el error fue traspolar lo que se encontró allí a todo el mundo. Hace 200 millones de años, cuando tenía lugar el Triásico, la estructura del mundo no era como la conocemos hoy, con cinco continentes, sino que toda la masa terrestre estaba concentrada en un sólo supercontinente llamado Pangea."Es posible que el meteorito haya provocado una espesa nube de polvo que cubrió la luz solar en gran parte del globo terráqueo y que allí la muerte de animales y plantas haya sido masiva. Pero es probable también que hacia el extremo Sur de Pangea, lo que suponemos era Ischigualsto y esta zona del mundo, la nube no fuera tan densa y esto haya permitido la subsistencia de los animales de esa época y la mutación hacia los dinosaurios que luego dominarían el planeta", explica el paleontólogo. De ser así, la puerta de ingreso al mundo dominado por los dinosaurios estaría en Ischigualasto. "Yo creo que en 5 años más, cuando esta idea termine de prender, el Valle de la Luna va a congregar a investigadores de todo el mundo", se arriesga Alcober quien confiesa: "El hecho de que desde San Juan estemos aportando un capítulo tan importante a la historia de los dinosaurios es increíble; es como cumplir el sueño del pibe". DIARIO DE CUYO