Ecoturismo en Entre Ríos
Escapadas a una reserva protegida frente a El Palmar.
Cerca de Ubajay y frente al Parque Nacional El Palmar, el Refugio de Vida Silvestre La Aurora del Palmar ofrece arroyos, lomadas y portentosas palmeras yatay sostenida en el suelo arenoso para disfrutar de la naturaleza desde el amanecer hasta el incomparable espectáculo de la caída del sol.
En 1998, el área de 1.300 hectáreas que ocupa La Aurora del Palmar se transformó en uno de los trece refugios que administra en el país la Fundación Vida Silvestre. En noviembre de 2001, la Legislatura de Entre Ríos declaró este lugar, concebido a la medida exacta del ecoturismo, “Reserva Provincial de Uso Múltiple”.
Los diferentes ambientes de esta reserva protegida -como selvas en galería, pastizales naturales, espinillares, bosques xerófilos, pajonales y lagunas- se pueden explorar a través de una caminata de 3 kilómetros por los caminos de tierra rojiza recortados en el palmar, que conducen hasta el arroyo El Palmar. Una canoa toma la posta de la excursión y un rato después, mientras se aleja del embarcadero, el aire se impregna de los aromas selváticos y los verdes intensos del entorno se replican en el agua.
La tercera etapa de la aventura transcurre en medio de la atmósfera bastante más fresca y húmeda de la selva. Un vehículo de doble tracción perfora a duras penas ese lúgubre túnel de plantas y árboles, hasta que el velo vegetal se descorre y otra vez se impone andar a pie unos 300 metros por senderos, pasarelas y puentes.
A tiempo, el guía sugiere orientar la mira de sus cámaras de fotos y filmadoras hacia los ejemplares de avifauna que aparecen en escena cada vez con mayor asiduidad. De entrada, los turistas habían sido sorprendidos por el paso de un hurón y, a esta altura, donde la omnipresente vegetación borra cualquier vestigio de actividad humana, arrecia el tránsito de gatos monteses, garzas, carpinchos y lobitos de río, cortejados por ruidosas bandadas de martín pescador y cotorras. Las miradas de asombro de los visitantes también apuntan inmóviles hacia los aleteos de la mariposa argentina, una variedad de color celeste originada en una oruga desprendida del guayabo.
La impronta didáctica del paseo recreativo permite familiarizarse con la amplia variedad de especies de árboles y plantas, entremezclados con las palmeras. Continuamente, el recorrido tropieza con estilizados ceibos, mataojos, ubajay, espinas de corona, vira vira, enormes helechos y el vistoso guayabo colorado, cuya corteza fría y rojiza guarda cierta similitud con el arrayán que crece en la región patagónica andina.
A su vez, las cabalgatas al paso, guiadas por experimentados baqueanos durante una hora y media, vadean cursos de agua y avanzan por huellas y senderos para alcanzar la zona de forestaciones y una quinta de cítricos, donde proponen a los jinetes que los acompañan desensillar y dedicarse por un rato a cosechar. La propuesta es tan entretenida que demanda una segunda vuelta.
Otra posibilidad igualmente enriquecedora de disfrutar de esta experiencia en contacto directo con la naturaleza la brindan las salidas de biciturismo -combinadas con la observación de la avifauna, el reconocimiento de la la flora autóctona y el insoslayable safari fotográfico-, que duran alrededor de una hora.
La gastronomía de esta región también ocupa un lugar central entre los atractivos de la reserva. La Aurora del Palmar forma parte del Circuito Gastronómico Huellas de Sabores de la Microrregión Tierra de Palmares, un tácito reconocimiento a sus especialidades de platos y pastelería preparados en base al fruto de la palmera -además de la jalea y el licor de yatay-, los dulces elaborados a partir de la producción de la quinta propia -son imperdibles las mermeladas de naranja y de mandarina-, alfajores, miel, nueces y panes caseros. Varios de estos sabores típicos se degustan en el restaurante El Refugio. La carta incluye minutas, menúes vegetarianos, sándwiches, ensaladas, pastas caseras y pescados del río Uruguay.
Cómo llegar. Desde Buenos Aires hasta La Aurora del Palmar son 377 kilómetros por ruta 9 (Panamericana ramal Escobar), Zárate-Brazo Largo, ruta 12 hasta Ceibas y ruta 14 hasta el km 202; tres peajes.
