Secretos de iglesias antiguas de la Ciudad de Buenos Aires
Ejemplos de diversidad cristiana, un muestrario muy especial de costumbres, arquitectura y arte.
Las iglesias porteñas son espacios de fe. Y tienen mucho para “contar” sobre ese aspecto, su comunidad y toda Capital. Además, hay algunos tempos que cumplían, cumplen, otros roles, aparte de los asistenciales. Eso explica que la Danesa tenga en su sede un escenario. Y que antes de edificar la propia, algunos inmigrantes se juntaran en otras partes. Los anglicanos, por ejemplo, en la Sociedad Filarmónica, hasta 1830, cuando construyeron el templo pionero de ese credo en Sudamérica en un predio cedido, en la actual 25 de Mayo al 200, Microcentro.
Catedral Metropolitana. Es el principal templo católico del país. Fue realizada entre 1752-1852. Se encuentra en San Martín y Rivadavia, frente a la Plaza de Mayo. Es el emblema católico en la Ciudad.
La Santa Casa de Ejercicios Espirituales San Ignacio de Loyola, de Independencia al 1100, fue impulsada por una mujer laica: la santiagueña María Antonia de Paz y Figueroa -Mamá Antula-, quien buscaba preservar así la obra de los jesuitas después de que fueron expulsados de América. Con nueve patios, un oratorio, dos capillas y 36 celdas, fue realizada entre 1795 y 1810 -y se expandió hasta 1900- por Juan Campos y Antonio Masella. Es una de las pocas construcciones coloniales que aún sobrevive, con algunas modificaciones, en toda Capital. La iglesia
San Miguel Arcángel nació en 1720 en Independencia y Tacuarí, cuando Juan Guillermo González Aragón, quien llegaba de Santiago del Estero, viudo y con sus hijos, impulsó junto a vecinos la creación de un espacio para cuidar enfermos y huérfanos "y dar sepultura".
Tuvo cambios. fue el arquitecto y pintor Augusto Ferrari, padre de León Ferrari, el primer argentino que ganó el León de Oro en la Bienal de Venecia, crítico feroz de la Iglesia Católica, quien modificó la fachada entre 1917 y 1922, con aires neorrenacentistas y mosaicos venecianos. Ferrari también pintó el interior, usando como modelos a amigos y conocidos. Posó incluso su mujer, desnuda, para una obra en la bóveda. Este templo está en Mitre y Suipacha.
La Catedral Anglicana San Juan Bautista es el templo no católico más antiguo de Argentina y el pionero de ese credo en toda Sudamérica. Está en un predio que perteneció al Convento Grande de San Ramón Nonato, donado por Juan Manuel de Rosas a los residentes ingleses.
La sede actual fue construida entre 1830 y 1831 por el escocés Richard Adams. Y las columnas de estilo dórico de la fachada la convierten también en ejemplo pionero del estilo neoclásico local (con ecos del Partenón griego). Entre los tesoros que guarda, hay un órgano de Bishop, Inglaterra, de 1824; vitrales y un cuadro que narra parte de la historia del espacio en inglés antiguo.
La Catedral Ortodoxa Rusa de la Santísima Trinidad, ubicada en Brasil 315, frente a Parque Lezama, abrió en 1901. La diseñó el arquitecto del patriarcado ruso Mihail Preobrazensky y su colega Alejandro Christophersen, quien hizo el Palacio San Martín, actual Cancillería, la adaptó para Buenos Aires. Con estilo moscovita del siglo XVIII, tiene cinco cúpulas azules con estrellas doradas. También, íconos y mayólicas, y una representación de la Trinidad realizada con mosaicos de Venecia en San Petersburgo.
En tanto, la Iglesia Danesa o Dinamarquesa, de confesión evangélica luterana, fue diseñada por Morten F. Rönnow e inaugurada en 1931. El ladrillo a la vista, la torre cuadrada y los detalles en blanco son sellos de la arquitectura nórdica. La fachada muestra bordes escalonados. Desde Casco Histórico porteño explicaron a este diario que aluden "a la escalera que usaban los ángeles del sueño de Jacob, según la Biblia”. No es todo. El templo, en Carlos Calvo 257, tiene una biblioteca con 7.000 volúmenes en varios idiomas y en el subsuelo, el gran salón con escenario. Y hay algo más curioso todavía: cuelga una réplica del buque escuela Copenhague, que zarpó de acá en 1928, navegó 1.500 millas, se cruzó con un barco noruego y desapareció.
La lista de templos de la Ciudad de Buenos Aires es larga. Esta es sólo una selección de algunos clave y curiosos, arbitraria.