Nuevas perspectivas del enoturismo en Catamarca
Buscan abordar la actividad vitivinícola desde la cultura, el arte e incluso la salud
Días atrás, la ciudad de Santa María fue escenario de un encuentro de diferentes actores institucionales que trabajan en el enoturismo, es decir, el turismo vinculado a las zonas productoras de vino, que en Catamarca están desplegadas especialmente en los departamentos del Oeste.
El turismo enológico presenta una serie de ventajas para atraer visitantes. Por un lado, está el paisaje natural en donde están emplazados los viñedos, con sus montañas y cielos diáfanos, a lo que se suma el acervo cultural-histórico y patrimonial de esos lugares. Por otro, está el valor del producto en sí, la posibilidad de degustar caldos en sus diversos varietales, que en la provincia son pródigos, asociándolos con la gastronomía típica. Pero además existe todo un nuevo campo derivado y cada vez más demandado por los turistas: el de los tratamientos de belleza y salud basados en el vino, las llamdas “vinoterapias”.
Obviamente, es necesario dotar a las zonas productoras de la infraestructura y los servicios que ya son comunes en cualquier destino turístico de cierto nivel.. Allí expusieron expertos que hicieron énfasis en la necesidad de que los actores del sector conozcan herramientas de gestión, planificación e innovación turística y productiva que se trabajan en diversos lugares del mundo, en los que se hizo del vino eje de una propuesta para el desarrollo del turismo. También, de recursos financieros que, aun en un contexto de crisis, están disponibles para este sector.
Durante el encuentro se acordó potenciar el desarrollo de esta actividad en zonas como Fiambalá, Tinogasta y Santa María, a través del contacto con referentes municipales, en una articulación que, necesariamente, debe incluir la participación de la Provincia, Nación y el sector privado.
De lo que se trata, en definitiva, es aprovechar los valiosos recursos disponibles para presentar una oferta distintiva dentro del mercado turístico del país.
Una estrategia que se vuelve imperativa ante un contexto en que se precisan todas las iniciativas para crear oportunidades de trabajo genuino.
