El Obelisco porteño cumplió 81 años
El mítico monumento ubicado en pleno centro de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se inauguró el 23 de mayo de 1936.
Su construcción fue en honor al 4º centenario de la primera fundación de la ciudad, en el año 1536 por Pedro de Mendoza. La obra fue planificada por el arquitecto Alberto Prebisch.
En aquellos años, el país atravesaba lo que se conoció como el período de Década Infame y en 1936, el presidente era Agustín P. Justo, quien nombró como intendente de la Ciudad a Mariano de Vedia y Mitre (lo que hoy sería el Jefe de Gobierno porteño). Fue este funcionario quien firmó el decreto que autorizaría la construcción de esta obra extraordinaria.
Por aquellos años, la realización del Obelisco estuvo envuelta en una gran polémica. Opiniones encontradas y opositoras provocaban la incertidumbre. Finalmente, se realizó. Y demandó tan sólo 31 días con el trabajo de unos 157 obreros.
Posterior a su inauguración, la polémica continuó. Su ubicación, su estética y su medida eran criticadas. De hecho, hasta se propuso demolerlo en 1939 contando con el apoyo del Congreso, pero una ordenanza del intendente Arturo Goyeneche lo evitó.
Cada una de las caras del Obelisco representa un hecho histórico de la Ciudad de Buenos Aires. Primero, la primera fundación; en segundo lugar, la segunda fundación (la de Juan de Garay en 1580). En tercer lugar, el momento en que se izó por primera vez la Bandera Nacional, creada por Manuel Belgrano, en la Ciudad en 1812. Y por último, la constitución de la Ciudad de Buenos Aires como capital del país en 1880.
El símbolo de 67,5 metros de altura representa el escenario por excelencia del ciudadano. Un lugar con historia, un lugar único e irremplazable.
El martes pasado, durante la celebración de este nuevo cumpleaños, un grupo de vecinos tuvo la posibilidad de subir los 206 escalones del monumento ícono de la Ciudad de Buenos Aires. Más de 21.000 personas se anotaron para realizar el ascenso al que finalmente accedieron 81 vecinos seleccionados.
Los participantes usaron equipamiento de seguridad (arnés, casco y guantes), y el ascenso y el descenso es a través de una escalera vertical de metal sin inclinación. En todo momento, los vecinos están acompañados por personal de Defensa Civil.
Desde junio, el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad invitará todos los meses a un grupo de vecinos a subir al Obelisco. Tal como ocurrió para la celebración del cumpleaños, la convocatoria se realizará a través de las redes sociales permitiendo que todos puedan disfrutar de esa maravillosa experiencia.